Formada por fenómenos de metamorfismo, esto es, por alteraciones de otras rocas preexistentes de tipo sedimentario o magmático, debido a cambios bruscos de presión y temperatura. Estos cambios son causados por variaciones en la posición de la corteza terrestre.
Los componentes esenciales de la anfibolita son un mineral de tipo anfíbol, como la hornblenda, la natofilita o la cummingtonita, y otro tipo de plagioclasa, como la andesina o la bytownita. Según el tipo de roca a partir de la que se haya formado, los componentes secundarios pueden ser la ilmenita, magntita, titanita, epidota o cuarzo. Además de estós, pueden presentarse otro tipo de componentes, denominados accidentales, que no marcan el carácter y propiedades de la roca, son: el diópsido, los grantes, la biotita y la moscovita.
En cuanto al aspecto, la anfibolita es una roca de grano grueso, de un color verde más o menos oscuro, con manchas de tonalidad blanquecina o amarillenta; su estructura puede ser masiva o formando bandas alternas, a veces con la persistencia de materiales de las rocas a partir de las cuales se formó.
SABIAS QUÉ...
El mayor interés práctico de la anfibolita es que suele hallarse ligada a los yacimientos de cobre, por lo que se emplea para la localización de éste. Ocasionalmente, se puede utilizar como piedra ornamental.
No hay comentarios:
Publicar un comentario