Este mineral, conocido también con los nombres de estibina y estibinita, aparece en la naturaleza en cristales prismáticos o aciculares, de forma alargada, aplanados transversalmente y con estriaciones superficiales muy características, en muchas ocasiones se encuentran formando cristales curvos o masas compactas y afieltradas. Tiene brillo metálico y su color es gris oscuro, aunque es frecuente que éste aparezca alterado con tonos rojos o amarillos procedentes de minerales asociados.
Entre las propiedades de la antimonita cabe destacar que es un mineral muy blando, pesado y que se rompe perfectamente en láminas. Convertido en polvo es soluble en ácido clorhídrico y en hidrato de potasio, produciendo en este último caso una solución de color amarillo anaranjado; funde al calor de la llama de una cerilla si se encuentra en láminas muy finas.
Se origina en filones hidrotermales a baja temperatura, donde es frecuente encontrarlo asociado a oro, plata, plomo y mercurio.
Su utilidad deriva de que es la principal fuente para la obtención de antimonio, producto de gran interés empleado en aleaciones metálicas antigricción. en baterías eléctricas, industria pirotécnica y, dada su dureza, para la confección de caracteres de imprenta.
SABIAS QUÉ...
Antiguamente, en los países de Lejano Oriente a la antimonita se le dio un empleo muy distinto del que tiene en la actualidad: muy finamente pulverizada era utilizada por las mujeres como sombra de ojos.
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